Las nuevas tecnologías tienen hoy en día una gran influencia en todos los sectores del mercado, incluso en el automovilístico. El big data en la industria automotriz se ha convertido en esencial para poder manejar el alto volumen de datos que generan las empresas del sector, sobre todo, con el uso de sensores y acceso remoto en millones de vehículos que envían datos sobre de forma constante.
Realizar un análisis predictivo de datos aporta muchos beneficios en la cadena productiva automovilística, convirtiendo la información en conocimiento útil para mejorar las prestaciones y características de los nuevos modelos que se diseñan y fabrican.
La importancia del big data en la industria del automóvil
El uso del big data en las empresas del sector de la automoción es una necesidad, debido al gran volumen de información que generan hoy en día y que proviene de los propios datos que aportan los vehículos, la información sobre las rutas y la geolocalización, e incluso, las carreteras y ciudades inteligentes.
Aplicando tecnología de inteligencia artificial para el análisis de todos esos datos se consiguen vehículos inteligentes y con un mayor grado de calidad y confort para el consumidor. Un coche actual, por ejemplo, es capaz de ajustar ciertos parámetros del coche de forma automática para adaptar sus condiciones a las necesidades del conductor y los pasajeros (temperatura). También pueden reaccionar de forma autónoma ante un peligro para evitar un accidente y proteger a los ocupantes del vehículo.
Por lo tanto, el big data permite extraer información valiosa para mejorar los vehículos en aspectos como la seguridad, el rendimiento, el consumo y el confort de los usuarios. Además, ayuda a las empresas del sector a ser más ágiles y eficientes, reduciendo sus costes y consiguiendo optimizar sus tareas y procesos.
Cómo gestiona el big data la industria automotriz
Manejar el enorme volumen de datos que se genera no es tarea fácil, pues los vehículos pueden transferir más de 1GB de información al día sobre diversos aspectos de su funcionamiento y condiciones. Esto, multiplicado por todos los vehículos que aportan información de manera continuada, crea un problema que debe resolverse aplicando nuevas tecnologías como big data, IA y aprendizaje automático.
Todos estos datos recibidos de los vehículos y otras fuentes de datos son capturados, organizados y almacenados de forma apropiada para facilitar su análisis mediante IA. Buscando patrones y aprendiendo de la información obtenida se generan nuevos conocimientos que se utilizan para mejorar la cadena productiva, los propios vehículos y los distintos componentes que lo forman.
Un vehículo actual tiene absolutamente todo controlado, generando datos de cualquier mínimo detalle. Toda esta información como consumos, distancias, desplazamientos, temperaturas o desgastes, entre otras, sirven para ofrecer también servicios extras a los usuarios (vías más eficientes en consumo, información sobre el tráfico en una determinada zona, ajuste de la velocidad máxima permitida, alternativas a rutas de viaje…).
Qué ventajas tiene el big data para la industria automotriz
El big data está suponiendo una gran revolución en la industria automotriz, impulsándola a mejorar en muchos aspectos y facilitando su crecimiento económico.
Los principales beneficios que aporta el big data al sector del automóvil son:
Incremento de la calidad en la producción
La principal aplicación del big data en automoción es descubrir nuevas formas de mejorar la fabricación de los vehículos y sus componentes para así poder ofrecer a los usuarios mayor calidad y seguridad, dos aspectos primordiales en el sector.
Gracias al big data se pueden analizar distintos procesos de fabricación para encontrar formas de optimización y mejora, o para detectar tareas poco productivas o que no aportan valor a la cadena de montaje. Por ejemplo, en el desarrollo de un nuevo motor, la enorme cantidad de datos que se obtienen durante las distintas fases de desarrollo y pruebas, sirven para aplicar mejoras y conseguir un mayor rendimiento, con un menor consumo de combustible.
Reducción de costes de fabricación
El big data ofrece información valiosa que permite descartar procesos de fabricación poco productivos o con un retorno de la inversión muy bajo. Además, también identifica problemas con el mal uso de los recursos, permitiendo tomar las medidas apropiadas para optimizarlos.
Otra de las grandes ventajas del uso de nuevas tecnologías como la business intelligence y el big data en este sector es la reducción de los costes de fabricación, al abandonar tareas desfasadas y de bajo rendimiento, sustituyéndolas por procesos modernos e innovadores.
También se reducen los tiempos de entrega al poder agilizar todas las fases del proceso de fabricación, haciendo llegar los vehículos en menores plazos a concesionarios y otras empresas del sector (lo que implica que los usuarios finales dispondrán de nuevos modelos en menos tiempo).
Fidelización del cliente
Muchos de los datos que maneja el sector están relacionados con los propios usuarios de los vehículos. Esta parte de la analítica de datos permite conocer mejor cuáles son las necesidades reales de los conductores y pasajeros de un vehículo, y así diseñarlos con un enfoque claro para mejorar su experiencia de usuario.
El big data permite identificar patrones y tendencias del mercado, permitiendo incluso predecir cuáles serán las necesidades de los conductores. Todos estos datos favorecen el crear una interacción personalizada con cada consumidor para ofrecerle aquello que realmente necesitan y conseguir que disfruten de un vehículo que se adapta a sus exigencias. El big data es una gran herramienta de fidelización que fomentará que los usuarios sigan comprando en el futuro vehículos de la misma marca debido al gran servicio obtenido y al alto grado de satisfacción del que disfrutan.
El big data en la industria automotriz es una herramienta fundamental para conseguir mejores vehículos, con un mayor nivel de seguridad y con un menor coste de producción. Su capacidad para ofrecer información valiosa de los usuarios y de los propios vehículos y proceso productivos, permite a las empresas del sector optimizar sus cadenas de montaje y ofrecer productos personalizados a las necesidades reales de cada usuario.
Los datos son el activo más importante de las empresas a día de hoy, y mucho más en un sector como el de la automoción, que siempre está apostando por la innovación, la automatización y las nuevas tecnologías, para ofrecer a los usuarios mejores vehículos, con un mayor nivel de seguridad y confort, y con muchos otros servicios que mejoren su calidad de vida.